"Loco loco loco, como un acróbata demente saltaré"
noche de farra,
no se lunfardo,
ni falta
que me hace para armar
estos quilombos de bebida,
texto, y geografía,
ya vas a ver:
lo bebimos, y a mezclar,
mariachis Madrid arrabal
lenguas tangos tengo
bandoneón y neón
reiterativo,
a ojos negros abrimos,
"negritos como mi suerte",
trayendo tragos tuerce,
limón en cuello ,
amargo,
acabamos coronita,
con afán republicano,
a puerta cerrada frío,
oliendo a autobús de paso,
-para vos un colectivo-,
así empezamos,
- tan negros esos reproches,
de oscura vida perdida,
y en la cantina la noche
, iba a la luna bebida,
cada dos por cuatro,
supongo que rueda por Callao,
como un queso descendido,
-estamos en Madrid,
a veces huele así -,
menos mal
al final esta Alfonsina,
como un cuento,
cual sirena, cantando bajo,
en el fondo,
del bar
mar
arrabal.
Llegando compañeros de mi vida,
voz rajada,
y otra birra,
astro astor y pizza,
hola,
empanada doble,
tango innoble
de cabeza y panzada,,
lanzada la voz rajada,
se extiende por las ventanas,
no hay confesión solo volver,
a pedir otra botella,
esta noche me mamo bien mamao,
pero ni modo ni a cerveza,
ron ni chupito se me perdió,
la cabeza...
gracias por la invitación,
otra canción,
a escote,
con ganas de loco saltar,
balada y balido,
dadle muchachada este bromuro,
que tiene oscuridad para mina,
y solo brilla borracho
con las luces del carburo.
Nos entretanguimos mucho tiempo,
voces,
lo mío coces
-soy de garganta con arena mas sin voz-,
a guitarra, birra, farra,
cuerda cruel de guitarra,
donde colgamos abrigo,
amigo,
y cerramos con volver
y nos fuimos al neón,
cambiando acordes y cuerdas
a pimientos calientes rojos,
puerta abierta
de otro garito,
-busca garota-
y allí:
alta,
de nombre la romana,
ocultando tu cabeza,
detrás de mi mirada,
ibas con otro tipo,
al que mentir,
noche,
gastaste con derroche,
lo que perdí,
fantoche,
que sos tipo de flauta,
agujereado ya quebrado ,
de papirusa ingrata ,
mal negro, gato pata,
hambre de las carpantas...
que mas puedo decir....
noche de farra,
no se lunfardo,
ni falta
que me hace para armar
estos quilombos de bebida,
texto, y geografía,
ya vas a ver:
lo bebimos, y a mezclar,
mariachis Madrid arrabal
lenguas tangos tengo
bandoneón y neón
reiterativo,
a ojos negros abrimos,
"negritos como mi suerte",
trayendo tragos tuerce,
limón en cuello ,
amargo,
acabamos coronita,
con afán republicano,
a puerta cerrada frío,
oliendo a autobús de paso,
-para vos un colectivo-,
así empezamos,
- tan negros esos reproches,
de oscura vida perdida,
y en la cantina la noche
, iba a la luna bebida,
cada dos por cuatro,
supongo que rueda por Callao,
como un queso descendido,
-estamos en Madrid,
a veces huele así -,
menos mal
al final esta Alfonsina,
como un cuento,
cual sirena, cantando bajo,
en el fondo,
del bar
mar
arrabal.
Llegando compañeros de mi vida,
voz rajada,
y otra birra,
astro astor y pizza,
hola,
empanada doble,
tango innoble
de cabeza y panzada,,
lanzada la voz rajada,
se extiende por las ventanas,
no hay confesión solo volver,
a pedir otra botella,
esta noche me mamo bien mamao,
pero ni modo ni a cerveza,
ron ni chupito se me perdió,
la cabeza...
gracias por la invitación,
otra canción,
a escote,
con ganas de loco saltar,
balada y balido,
dadle muchachada este bromuro,
que tiene oscuridad para mina,
y solo brilla borracho
con las luces del carburo.
Nos entretanguimos mucho tiempo,
voces,
lo mío coces
-soy de garganta con arena mas sin voz-,
a guitarra, birra, farra,
cuerda cruel de guitarra,
donde colgamos abrigo,
amigo,
y cerramos con volver
y nos fuimos al neón,
cambiando acordes y cuerdas
a pimientos calientes rojos,
puerta abierta
de otro garito,
-busca garota-
y allí:
alta,
de nombre la romana,
ocultando tu cabeza,
detrás de mi mirada,
ibas con otro tipo,
al que mentir,
noche,
gastaste con derroche,
lo que perdí,
fantoche,
que sos tipo de flauta,
agujereado ya quebrado ,
de papirusa ingrata ,
mal negro, gato pata,
hambre de las carpantas...
que mas puedo decir....
Recompuse traje de faisán y la encontré,
era otra, con que malgastar el tiempo,
y loco, loco, loco como un acróbata demente otra vez, ...
la luna sigue la rueda como un queso descendido...
a malos aires olvido
cuando yo te vuelva,
revuelva,
que yira,
yira,
gira,
girando
a cuatro ruedas,
no la luna,
pequeñas descendí,
y de regreso,
de nuevo al flaco lecho,
con la espalda en el pecho,
no dormí...."
Rezgo Reis
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